Melancolía

 

Solía pensar que me gustaba la soledad. De hecho, disfrutaba de ella cuando podía. Siempre imaginaba cómo sería vivir sola en mi propio espacio y que mi familia viniera a visitarme por raticos. Luego, cada quien volvía a sus quehaceres, a su lugar. 

Pero eso era cuando estaba rodeada de gente, de los míos y sus ruidos. Y aunque fueran mi familia, mi mamá, mi papá con su constante radio encendido, mi abuela que a sus 93 años no dejaba de hablar de día ni de noche,  mi hermana con  su estridente tono de voz (me va a matar si lee esto), mis sobrinos que no me dejaban tranquila ni en paz cuando nos visitaban y aunque esto era adorable, a veces se volvían inaguantables, equis momento, cualquier situación. 

Las cosas han cambiado tanto en los últimos 3 años.  Mi mamá y abuela se fueron "de viaje", ahora están en el sueño profundo. Mi hermana y sobrinos se mudaron a otro país y aunque conversamos con frecuencia, no es lo mismo. Ahora extraño sus voces, extraño que sean fastidiosos, quisiera que no me dejaran en paz ni un minuto. En mi casa sólo quedamos mi papá y yo…. haciendo lo mejor que podemos con esta melancolía, con esta tristeza, con estas ganas de querer retroceder el tiempo y disfrutar de los nuestros aunque sea una vez más.

Ambos tratamos de mantener la mente ocupada para que la tristeza no se apodere de nosotros… pero es inevitable. Una canción, una frase, un olor…cualquier detalle desencadena un sinfín de recuerdos, de momentos vividos y que anhelamos tener de nuevo. De eso se trata la melancolía…."es un sentimiento que constantemente nos recuerda que falta algo, que estuvo ahí, que era bueno para nosotros, pero que ya no podemos recuperar”.

Lo cierto es que así me siento ahora. No sé si es porque es domingo en la noche… Estoy sola en mi cuarto, afuera está lloviendo, escucho música Indi o que ya entré al cuarto escalón de mi vida. O todas las anteriores.

 

Mañana será otro día. Espero que sea mejor.